Cuando me levanté para ir a mear ella saltó al suelo y sin querer le pise medio cuerpo, en vez de quejarse empezó a maullar como una perversa sexual, le dí dos tortas para ver si continuaba su holocausto de placer y así fue... NO PARABA DE MAULLAR DE ORGASMOS la muy viciosa cada vez que le pegaba con la mano, no soy mucho de ponerme a pegarle con un látigo mientras lleva una mordaza en la boca... por suerte no salí tan perturbado.
Al día siguiente volví a probar para ver otra vez como empezaba a maullar de gustos, que asco, en ese momento me sentí zoofílico a más no poder sabiendo que le estaba dando placer a un animal...

La vida es así, no todo es color de rosa... gracias por leer este post amigo.
1 comentario:
Mother of god..
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